Baila, con el corazón apuñalado, canta
Y ríe porque la herida es danza y sonrisa,
Pide a las víctimas inmoladas que duerman
Y tú baila y canta tranquila.
Es inútil llorar. Contén las ardientes lágrimas
Y del grito de la herida extrae una sonrisa.
Es inútil explotar. La herida duerme tranquila.
Déjala y venera tus humillantes cadenas.
Es inútil rebelarse. Nada de cólera contra el furioso látigo.
¿Qué sentido tienen las convulsiones de las víctimas?
El dolor y la tristeza se olvidan
Y también uno o dos muertos, y las heridas.
Convierte el fuego de tu herida en melodía
Que resuene en tus labios anhelantes
Donde queda un resto de vida
Para un canto que no callan la desgracia ni la tristeza.
Es inútil gritar. Repulsa y locura.
Deja al muerto tendido, sin sepultura.
Cualquiera muere... que no haya gritos de tristeza.
¿Qué sentido tienen las revueltas de los presos?
Es inútil rebelarse. En la gente, los restos
De venas no dejan circular la sangre.
Es inútil rebelarse mientras algunos inocentes
Esperan ser inmolados.
Tu herida no se diferencia de las demás.
Baila, ebria de tristeza mortal.
Los insomnes y los perplejos están abocados al silencio.
Es inútil protestar. Descansa en paz.
Sonríe al rojo puñal con amor
Y cae al suelo sin temblar.
Es un don que te degüellen como una oveja,
Es un don que te apuñalen el corazón y el alma.
Es una locura, víctima, que te rebeles.
Es locura la cólera del esclavo cautivo.
Baila la danza del fuerte, del feliz
Y sonríe con la felicidad del esclavo a sueldo.
Contén el dolor de la herida: es pecado gemir,
Y sonríe complacida al asesino culpable.
Regálale tu corazón humillado
Y déjale cortar y apuñalar con placer.
Baila con el corazón apuñalado, canta
Y ríe: la herida es danza y sonrisa.
Di a las víctimas degolladas que duerman
Y tú baila y canta tranquila.
Nazik Al Malaika
Del poemario: El hueco de la ola (1957)
lunes, 26 de mayo de 2008
NOCTURNO
La noche se desliza por las estepas,
Las manos de las nubes pasan por el horizonte
Y las tinieblas duermen,
En impresionante calma,
Bajo las alas del silencio.
Sólo se oye el zureo de las palomas,
El murmullo gimiente de los arroyos
Y un ruido de pasos en la oscuridad
Que caminan suavemente.
Me siento, entregándome a la calma de la noche,
Contemplo el color de las tristes tinieblas,
Lanzo mis cantos al espacio
Y lloro por todos los corazones ingenuos.
Oigo los susurros de las palomas,
La lluvia que cae en la noche,
Los gemidos de una tórtola en la oscuridad
Que canta a lo lejos en las ramas
Y la queja lejana de un molino
Que gime en la noche y llora de fatiga.
Sus gritos atraviesan mis oídos
Y va a morir detrás de las colinas.
Escucho... sólo se oyen las plantas.
Miro... sólo se ve oscuridad.
Nubes, silencio y una noche triste.
¿Cómo no sentirme afligida?
La vida para mí es como esta noche:
Tinieblas, melancolía, desesperanza,
Mientras los demás sueñan con claridad
En una profunda e impresionante noche.
Llanto continuo de la naturaleza,
Silencio de las tinieblas, gemido de los vientos,
Suspiros de la brisa vespertina,
Lágrimas del rocío en los ojos de la mañana.
Veo en las riberas de la desgracia
A la multitud de afligidos,
El cortejo de los hambrientos
Ahuyentados por los aullidos del destino,
Sin poder pronunciar palabras de despedida.
Escucho: sólo los sollozos
Mandan su eco a mis oídos
Por detrás de las fortalezas y sobre las praderas.
Entonces, ¿quién puede cantar conmigo?
En el futuro portaré mi lira,
Lloraré la desgracia del universo
Y declamaré mi compasión por su infortunio
A los oídos del cruel tiempo.
Nazik Al Malaika (Bagdad)
Del poemario: Enamorada de la noche (1945)
Las manos de las nubes pasan por el horizonte
Y las tinieblas duermen,
En impresionante calma,
Bajo las alas del silencio.
Sólo se oye el zureo de las palomas,
El murmullo gimiente de los arroyos
Y un ruido de pasos en la oscuridad
Que caminan suavemente.
Me siento, entregándome a la calma de la noche,
Contemplo el color de las tristes tinieblas,
Lanzo mis cantos al espacio
Y lloro por todos los corazones ingenuos.
Oigo los susurros de las palomas,
La lluvia que cae en la noche,
Los gemidos de una tórtola en la oscuridad
Que canta a lo lejos en las ramas
Y la queja lejana de un molino
Que gime en la noche y llora de fatiga.
Sus gritos atraviesan mis oídos
Y va a morir detrás de las colinas.
Escucho... sólo se oyen las plantas.
Miro... sólo se ve oscuridad.
Nubes, silencio y una noche triste.
¿Cómo no sentirme afligida?
La vida para mí es como esta noche:
Tinieblas, melancolía, desesperanza,
Mientras los demás sueñan con claridad
En una profunda e impresionante noche.
Llanto continuo de la naturaleza,
Silencio de las tinieblas, gemido de los vientos,
Suspiros de la brisa vespertina,
Lágrimas del rocío en los ojos de la mañana.
Veo en las riberas de la desgracia
A la multitud de afligidos,
El cortejo de los hambrientos
Ahuyentados por los aullidos del destino,
Sin poder pronunciar palabras de despedida.
Escucho: sólo los sollozos
Mandan su eco a mis oídos
Por detrás de las fortalezas y sobre las praderas.
Entonces, ¿quién puede cantar conmigo?
En el futuro portaré mi lira,
Lloraré la desgracia del universo
Y declamaré mi compasión por su infortunio
A los oídos del cruel tiempo.
Nazik Al Malaika (Bagdad)
Del poemario: Enamorada de la noche (1945)
Memorial de la guerra en Irak



Los fuertes siempre abusan de los más débiles, los miserables de los honestos, los hombres toman en represalia a las mujeres acorazados por su posición, mientras ellas gritan plegarias de dolor y lloran y no tienen fuerzas y quisieran matar a esos cabrones que matan a sus maridos, padres y hermanos, que las humillan subvencionados por un gobierno del "primer mundo", el primero... el más fuerte, el que más ha mentido, y miente... y quisieran morir... y tiemblan... ante el del sistema capitalista de fe única y verdadera... el gran juego en el que nos acomodamos y seguimos permitiendo que todo esto suceda con los ojos vendados y la única preocupación de obtener una buena posición, un buen sueldo, y encontrar tiempo para ir al cine... es verdad, ellos no son santos, entonces seamos perros, castiguémosles, somos mejores por hacerlo, al fin y al cabo forma parte de la educación... como la primera bofetada.
Bush: "La guerra en Irak es justa, noble y necesaria"
"Expulsar a Sadam del poder fue una buena decisión", asegura el presidente de los EE UU en un discurso en el Pentágono para conmemorar el quinto aniversario del inicio de la guerra
AGENCIAS / ELPAÍS.com - Washington / Madrid - 19/03/2008
sábado, 24 de mayo de 2008
LAS CARRERAS DEL DOLOR
Ponte en marcha, si aún es posible ir.
Llévate la blancura de las paredes, el cobre de los potes y los silencios del paseo en las avenidas. Llévate los visitantes del aburrimiento, los deseos ciegos y el dinero artificial de las risas. Me he curado de mi tristeza y he enterrado sus cenizas en la grava.
La rechacé y la sepulté en las piedras. Curado de mi esperanza de curarme, la llevo en mí como una inflamación del cerebro o una hinchazón de los párpados.
Me he curado de tu amor. Ahora puedo vivir.
BASSAM HAYYAR
Llévate la blancura de las paredes, el cobre de los potes y los silencios del paseo en las avenidas. Llévate los visitantes del aburrimiento, los deseos ciegos y el dinero artificial de las risas. Me he curado de mi tristeza y he enterrado sus cenizas en la grava.
La rechacé y la sepulté en las piedras. Curado de mi esperanza de curarme, la llevo en mí como una inflamación del cerebro o una hinchazón de los párpados.
Me he curado de tu amor. Ahora puedo vivir.
BASSAM HAYYAR
PORQUE SOY UN EXTRAÑO
Porque soy un extraño
porque el amado Iraq
está lejos y yo tengo nostalgia
de él, a él... le grito: "Iraq!".
Al llamarlo regresan a mí sollozos
que el eco desgarra.
Siento que he atravesado el horizonte
hacia el mundo de la muerte que no contesta
a mi llamada.
Si agito las ramas
no cae sino muerte:
piedras,
piedras y no frutos,
incluso las fuentes
son piedras, incluso el aire húmedo,
piedras que un poco de sangre humedece.
Piedras es mi voz, rocas es mi boca
mis pies, un viento que surca los desiertos.
Beirut, 15-4-1962.
miércoles, 21 de mayo de 2008
NOS FALTA UN PRESENTE
Partamos tal como somos:
una dama libre
y su amigo fiel.
Partamos juntos en dos direcciones.
Partamos como somos, unidos
y separados.
Nada nos causa dolor,
ni el divorcio de las palomas ni el frío en las manos
ni el viento en torno a la iglesia.
Los almendros no han florecido del todo.
Sonríe para que sigan floreciendo
entre las mariposas de tus hoyuelos.
Dentro de poco tendremos otro presente.
Si te das la vuelta no verás
sino exilio tras de ti:
tu dormitorio,
el sauce de la plaza,
el río, tras los edificios de cristal
y el café de nuestras citas... todo, todo
preparado para convertirse en exilio.
¡Seamos buenos!
Partamos tal como somos:
una mujer libre
y un amigo fiel a sus flautas.
No tenemos suficiente edad para envejecer juntos,
ir a paso lento al cine,
ver el epílogo de la guerra entre Atenas y sus vecinos
y asistir dentro de poco
a la ceremonia de paz entre Roma y Cartago.
Dentro de poco los pájaros emigrarán de un tiempo a otro.
¿Este camino no es más que polvo
en forma de sentido? ¿Nos ha conducido
en un viaje efímero entre dos mitos?
¿Es necesario y somos necesarios,
como un extraño que se ve en los espejos de su extraña?
"No, éste no es mi camino a mi cuerpo".
"No hay soluciones culturales para las preocupaciones existenciales".
"Allá donde estés, mi cielo es
verdadero".
"¿Quién soy yo para devolverte el sol y la luna precedentes?".
Seamos buenos...
Partamos tal como somos:
una amante libre
y su poeta.
No ha caído suficiente
nieve de diciembre. Sonríe
y caerá como copos de algodón sobre las oraciones del cristiano.
Dentro de poco regresaremos a nuestro mañana, tras nosotros,
allí donde éramos dos niños al comienzo del amor
jugando a Romeo y Julieta
para aprender el léxico de Shakespeare...
Las mariposas volaron del sueño
como el espejismo de una paz rápida.
Nos coronaron con dos estrellas
y nos mataron en el combate por el nombre
entre dos ventanas.
Partamos, pues,
y seamos buenos.
Partamos tal como somos:
una mujer libre
y su amigo fiel.
Partamos tal como somos. De
Babilonia vinimos con el viento
y hacia Babilonia vamos...
Mi viaje no es suficiente
para que, sobre mis huellas, los pinos se conviertan
en panegíricos del lugar meridional.
Nosotros somos buenos aquí. El viento del norte
es nuestro viento y meridionales son las canciones.
¿Soy yo otra tú
y tú otro yo?
Éste no es mi camino a la tierra de mi libertad.
Éste no es mi camino a mi cuerpo
y yo no seré "yo" dos veces
ahora que mi pasado ha ocupado el lugar de mi mañana
y me he escindido en dos mujeres.
No soy oriental
ni occidental.
No soy un olivo que ha dado sombra a dos aleyas.
Partamos, pues.
"No hay soluciones colectivas para las obsesiones personales".
No es suficiente que estemos juntos
para estar juntos...
Nos falta un presente para ver
donde estamos. Partamos tal como somos,
una mujer libre
y su viejo amigo.
Partamos juntos en dos direcciones.
Partamos juntos
y seamos buenos...
MAHMUD DARWISH
una dama libre
y su amigo fiel.
Partamos juntos en dos direcciones.
Partamos como somos, unidos
y separados.
Nada nos causa dolor,
ni el divorcio de las palomas ni el frío en las manos
ni el viento en torno a la iglesia.
Los almendros no han florecido del todo.
Sonríe para que sigan floreciendo
entre las mariposas de tus hoyuelos.
Dentro de poco tendremos otro presente.
Si te das la vuelta no verás
sino exilio tras de ti:
tu dormitorio,
el sauce de la plaza,
el río, tras los edificios de cristal
y el café de nuestras citas... todo, todo
preparado para convertirse en exilio.
¡Seamos buenos!
Partamos tal como somos:
una mujer libre
y un amigo fiel a sus flautas.
No tenemos suficiente edad para envejecer juntos,
ir a paso lento al cine,
ver el epílogo de la guerra entre Atenas y sus vecinos
y asistir dentro de poco
a la ceremonia de paz entre Roma y Cartago.
Dentro de poco los pájaros emigrarán de un tiempo a otro.
¿Este camino no es más que polvo
en forma de sentido? ¿Nos ha conducido
en un viaje efímero entre dos mitos?
¿Es necesario y somos necesarios,
como un extraño que se ve en los espejos de su extraña?
"No, éste no es mi camino a mi cuerpo".
"No hay soluciones culturales para las preocupaciones existenciales".
"Allá donde estés, mi cielo es
verdadero".
"¿Quién soy yo para devolverte el sol y la luna precedentes?".
Seamos buenos...
Partamos tal como somos:
una amante libre
y su poeta.
No ha caído suficiente
nieve de diciembre. Sonríe
y caerá como copos de algodón sobre las oraciones del cristiano.
Dentro de poco regresaremos a nuestro mañana, tras nosotros,
allí donde éramos dos niños al comienzo del amor
jugando a Romeo y Julieta
para aprender el léxico de Shakespeare...
Las mariposas volaron del sueño
como el espejismo de una paz rápida.
Nos coronaron con dos estrellas
y nos mataron en el combate por el nombre
entre dos ventanas.
Partamos, pues,
y seamos buenos.
Partamos tal como somos:
una mujer libre
y su amigo fiel.
Partamos tal como somos. De
Babilonia vinimos con el viento
y hacia Babilonia vamos...
Mi viaje no es suficiente
para que, sobre mis huellas, los pinos se conviertan
en panegíricos del lugar meridional.
Nosotros somos buenos aquí. El viento del norte
es nuestro viento y meridionales son las canciones.
¿Soy yo otra tú
y tú otro yo?
Éste no es mi camino a la tierra de mi libertad.
Éste no es mi camino a mi cuerpo
y yo no seré "yo" dos veces
ahora que mi pasado ha ocupado el lugar de mi mañana
y me he escindido en dos mujeres.
No soy oriental
ni occidental.
No soy un olivo que ha dado sombra a dos aleyas.
Partamos, pues.
"No hay soluciones colectivas para las obsesiones personales".
No es suficiente que estemos juntos
para estar juntos...
Nos falta un presente para ver
donde estamos. Partamos tal como somos,
una mujer libre
y su viejo amigo.
Partamos juntos en dos direcciones.
Partamos juntos
y seamos buenos...
MAHMUD DARWISH
TU NOCHE ES DE LILAS
La noche se sienta donde tú estás. Tu noche es de
lilas. A veces, de los rayos de tus hoyuelos
se escapa un signo que rompe la copa de vino
y alumbra la claridad de las estrellas. Tu noche es tu sombra,
un fragmento de tierra legendaria para igualar
nuestros sueños. Yo no soy el viajero ni el residente en
tu noche de lilas. Soy el que un día fue
yo. Cada vez que la noche te rodea, mi corazón
duda entre dos moradas: y
ni el ser ni el alma se satisfacen. En
nuestros cuerpos, un cielo abraza a una tierra, y toda tú
eres tu noche... una noche que resplandece como la tinta de los astros. Una noche,
bajo la protección de la noche, repta por mi cuerpo
aletargada, cual sopor de zorros. Una noche que rezuma misterio,
luminosa sobre mi lenguaje. Cuanto más se aclara, más
temo el mañana en el puño de la mano. Una noche
que contempla segura y tranquila su
inmensidad que sólo rodean su espejo
y las canciones de los antiguos pastores al verano de unos emperadores
enfermos de amor. Una noche que florece en la poesía
preislámica sobre los brincos de Imru Al Qays[1] y otros
y, para los soñadores, ha ensanchado el camino de la leche hacia una luna
hambrienta en los confines de las palabras...
MAHMUD DARWISH
lilas. A veces, de los rayos de tus hoyuelos
se escapa un signo que rompe la copa de vino
y alumbra la claridad de las estrellas. Tu noche es tu sombra,
un fragmento de tierra legendaria para igualar
nuestros sueños. Yo no soy el viajero ni el residente en
tu noche de lilas. Soy el que un día fue
yo. Cada vez que la noche te rodea, mi corazón
duda entre dos moradas: y
ni el ser ni el alma se satisfacen. En
nuestros cuerpos, un cielo abraza a una tierra, y toda tú
eres tu noche... una noche que resplandece como la tinta de los astros. Una noche,
bajo la protección de la noche, repta por mi cuerpo
aletargada, cual sopor de zorros. Una noche que rezuma misterio,
luminosa sobre mi lenguaje. Cuanto más se aclara, más
temo el mañana en el puño de la mano. Una noche
que contempla segura y tranquila su
inmensidad que sólo rodean su espejo
y las canciones de los antiguos pastores al verano de unos emperadores
enfermos de amor. Una noche que florece en la poesía
preislámica sobre los brincos de Imru Al Qays[1] y otros
y, para los soñadores, ha ensanchado el camino de la leche hacia una luna
hambrienta en los confines de las palabras...
MAHMUD DARWISH
martes, 20 de mayo de 2008
Alumbramiento

Renamorarse de cobardías y destripamientos
Vertiéndose una lagrima tras otra
Arrojándolas a un precipicio
Donde poder quemarlas
Tal como se bebe en los caminos
Que no llevan a ningún lugar
Tal como vestirse ignorante
Para poder alzar la falda usurpada
No conciliaré con los codos
El ritmo de la noche
Renamorada de los párpados que pesan
Y el atuendo gris cenizo
Que nubla cada beso
Reanudando la pena de muerte
Hacia mis senos
Siento lenguas de plata
Dolor mezquino
No queda nada
Excepto mascaras carnavalescas que sonríen
Vertiéndose una lagrima tras otra
Arrojándolas a un precipicio
Donde poder quemarlas
Tal como se bebe en los caminos
Que no llevan a ningún lugar
Tal como vestirse ignorante
Para poder alzar la falda usurpada
No conciliaré con los codos
El ritmo de la noche
Renamorada de los párpados que pesan
Y el atuendo gris cenizo
Que nubla cada beso
Reanudando la pena de muerte
Hacia mis senos
Siento lenguas de plata
Dolor mezquino
No queda nada
Excepto mascaras carnavalescas que sonríen
miércoles, 14 de mayo de 2008
Sarv€di

Noche sabor a ciruela
en nicho de otoño
sois de una dulcedumbre blanca
que canta la hora de la partida
dispuesta
nevando azucar
vertéis los sólidos reflejos del hastío
a las azuladas palomas
bajaré a tus brazos a recostarme
como ángel de cuna con lágrimas secas
para paular fatigas
para florecer a sombras
en los pies del trigo
por tu boca huraña
dormida en mis manos
Sábeme entonces en tu adentro
pacto trágico
sábeme
cederé con gusto
bajaré a pelearle de frente
los peces
a la cara
lunes, 12 de mayo de 2008
La música llueve

La música llueve
Bailar pueden los vasos ojos
Y las horas nocturnas
Los tiovivos y tardíos señores
El cúmulo y verdoso pánico
Las rosadas teces como cajas
Alternan hundimientos de puños
Con olores de jazmín fresco
Sonetos múltiples
Cantos turcos
Frecuentados quisiera
Por el pan afluyente de las olas
No es que este ardiendo un roble
Pero el fuego queda cerca.
Bailar pueden los vasos ojos
Y las horas nocturnas
Los tiovivos y tardíos señores
El cúmulo y verdoso pánico
Las rosadas teces como cajas
Alternan hundimientos de puños
Con olores de jazmín fresco
Sonetos múltiples
Cantos turcos
Frecuentados quisiera
Por el pan afluyente de las olas
No es que este ardiendo un roble
Pero el fuego queda cerca.
v...
miércoles, 7 de mayo de 2008
viernes, 2 de mayo de 2008
r... r
Por oscura que sea la noche y el miedo beba en tu piel
Toma mi mano y sígueme
Te mostraré lo que tu alma no ve
Si dejas tu alma volar
Tus sueños se harán realidad
Toma mi mano y sígueme
Te mostraré lo que tu alma no ve
Si dejas tu alma volar
Tus sueños se harán realidad
r... r
Si los sueños flotaran en el aire
Y en un dibujo se volvieran formas y trazos
De los más simples
A los más raros
Quisiera que el aire trajese tus trazos
A ese dibujo de mis sueños
Y en un dibujo se volvieran formas y trazos
De los más simples
A los más raros
Quisiera que el aire trajese tus trazos
A ese dibujo de mis sueños
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