viernes, 25 de julio de 2008

Despedida



Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizás no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, y apasionado y loco.
Me lo sembré en el alma para quererte a tí
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
Pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré:
Pero, al quedarme sólo sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé
Te digo adiós, y acaso, con esta despedida
mi más hermoso sueño muere, dentro de mi...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.



Jose Angel Bueza CUBA

destierro

Cálle!
Pues las bocas que se auxiliaron
más les vale guardar silencio
un silencio fúnebre ante el muerto vivo
un silencio solo
en el que hacerse compañia
no decirse cuando se quiere
no decirse ya no te quiero
solo un apretón de manos
quizás de que te extraño
tal vez de fue un placer
una mirada ausente
ante un mirar perdido
y un silencio que sonrie
complice de las nostálgias

lunes, 21 de julio de 2008

Añoranzas


A veces vienen a visitarnos las añoranzas sin aparente razón de un por qué
con la vista enneblecida por la lejanía... entre copa y copa, risa a risa
una canción en el autobús, la maldición de un poema... los domingos temprano...
Son las noches solas que se pasean desnudas en la piscina cobijadas por la frialdad del agua y algún rayo de luna que aún sonríe hacia el vacío.
Se pasea el tiempo venciendo/ vencido el ánimo
Paso a paso vociferando los pies con griterío constante...
divertido...
el que empuja, el que retrae... ambos dubitativos
si los ojos, si los dientes...
Al final humildemente en silencio se les recuerda honestidad, prudencia y valía
de callar las ausencias en virtud
dejando rastros de barcos de pan que alimentan y retraen las extrañezas
tiritantes en los labios
arena entre los dedos

miércoles, 16 de julio de 2008

A la deriva


Su barco es un colchón tan fatigado
que apenas puede el agua
servirle de camino.

Desde su anciana proa
el hombre mira y mira la corriente
buscando bajo el líquido
la maraña del tiempo,
como si fuese la mirada
un sedal con anzuelo
donde prender al pez de los recuerdos.
Qué fue de aquella noche de cómplices palabras,
de susurros bordados en los gestos,
donde no hubo rincón
que no bañase la saliva
cuando incubó sus huevos el ave del amor.

De todo aquel naufragio
el hombre sólo pudo conservar
un gabán de dolor sobre la herida,
el retazo de cama
donde creyó sentirse amado
y que tan sólo fue el extremo
del hilo que enredaba la mujer.

Cuando ella dijo adiós,
el supo que era nave a la deriva.


Juan Calderón
Alburquerque, Badajoz (España), 1952.

De Barro


Dios con pellas de barro formó al hombre.
Si soy hombre soy barro. Barro con sangre dentro.
Un barro que derecho se sostiene
con el andamio de oro que es mi alma.
¿Qué me importa ser barro y que me quiebre
si hay tanta tierra buena para reconstruirme,
y hay un agua tan pura para lavar la herida
de mi carne de barro ya tantas veces rota?
Miro la amante tierra con mis ojos
más hondos del amor.
La tierra que de rojo tiñe la atardecida.
La tierra donde están las raíces del parto.
La tierra donde vuelve la muerte a renacer
alimentando nuevas esperanzas.
La tierra que sostuvo mi principio
para ser algún día ceniza de final.
¿Y el agua? Cuando corre por el estrecho cauce
de un río de montaña que mi descanso arrulla;
cuando se extiende como un manto
de plata azul y verde sobre el mar;
cuando suena en el roce de la acequia domada;c
uando cae con la lluvia regalada del cielo
mis calenturas aplacando,
es el fluir fundamental que inunda
mi corazón sediento con su corriente viva.
Tierra y agua hermanadas en mi larga andadura
me han demostrado el privilegio
de haber sido formado por la mano de Dios,
ya que del agua y de la tierra juntas
nace el barro que es hombre.

José Javier Aleixandre
Irún (España), 1924

sábado, 12 de julio de 2008

Carmín


Seguir desvistiendo tu figura
Que me mira irreconocible
Saboreando los miembros amputados

No podemos reestablecer las barcas
Habiendo salido cruz
Tras la siembra primaveral
Incapaz de sostenerse

Podría dormir amándote
Hasta el último orgasmo
Para después rehielar
Las navajas del silencio
Con esponjas ornitorrincas
Semi vetustas semi colíricas

Sigo sangrando haber amado
Desplumando hoy ese negro picoteado
A reinciaccidentes
del bajo ombligo

Todavía se disgusta decidir
Que la saliva
Parta nuestra
Descosiendo la traquea
hacia los naranjos

Sin saber reconocer
Que los dientes alquitranados
Dejan un sabor hostil
Difícil de reinaugurar

viernes, 11 de julio de 2008

centro de mesa


Siempre se batalla clandestinamente
Mientras la textura de la carne
Adopta a hongos carroñeros
Que van rasgando futuros puentes

Sus parásitos se socorren en el orín
Ladrillo tras ladrillo
Desesperanza frente a fuerza
Con tan solo una pluma
E infinidad de muros univigales

Se toleran juiciosos
Los elefantes necesitan quién les limpie
A cambio se les da de comer
¿Orden cíclico?

jueves, 3 de julio de 2008

De vuelta



Se abren de piernas las olas sonámbulas y resacosas
aquí a este lado...
con sus familiares olores de caña, sal... y azufre

Tienden a estar de paso
silenciosas...
miran distantes y cercanas con sus pegajosos pies

Alegría sería hacer el amor con la noche
llenarla de estrellas
usurparle variedad de amaneceres
a destiempo

Alegría sencilla al velar ese esbozo a sorbitos
cavilando entre un puente y otro
sonriendo...

Aquí
brinda la armonía febrilmente
ante el vuelo de las gaviotas...